18 noviembre 2007

El primer ministro es responsable por la muerte de 33 soldados”



El periódico londinense Sunday Times, afirma que "el primer ministro, Ehud Olmert, fue hallado responsable por la Comisión Vinograd, de la continuación de la segunda guerra del Líbano de verano de 2006 por 60 horas, cuando ya se sabía que era inminente el acuerdo de cese del fuego."
En ese período de tiempo murieron 33 soldados israelíes.
Fuentes allegadas a la Comisión Vinograd que investiga los sucesos de la guerra entre Israel y los soldados de Hesbollah, habrían afirmado que el informe final, aún aguardado por la población del país, se centrará en esas horas de los combates.
El documento, según esas fuentes, mostrará que "Olmert sabía que el acuerdo para detener el enfrentamiento estaba cerca y ordenó al Ejército salir a una misión imposible con la finalidad de sellar el fracaso con una declaración de principios."
Un alto oficial del Ejército habría dicho a un corresponsal del mismo medio de prensa, que el operativo fue planeado durante dos meses y su meta era liquidar a la organización terrorista libanesa. Pero el ataque estaba planeado para ser el inicio de la guerra y no para finalizarla, porque se requerían 96 horas para llevarlo a cabo y las tropas no contaron con ese tiempo."
Días atrás la Comisión Vinograd publicó las declaraciones del que fuera asesor del ex primer ministro Ariel Sharón, Dov Veisglass. Afirmó en su testimonio que seguramente Sharón no habría salido a una guerra en las condiciones planteadas el día que fueron secuestrados dos soldados reservistas por Hesbollah en la frontera con Líbano

Miles de negros piden justicia en Estados Unidos



Marcharon contra los crímenes racistas

Miles de negros estadounidenses se manifestaron en Washington para pedirle a las autoridades federales más firmeza frente a los crímenes racistas y menos intransigencia frente a los delincuentes negros.

WASHINGTON, AFP

La manifestación se inscribe en un movimiento de descontento nacido tras varios casos de jóvenes negros muertos por policías o perseguidos por la justicia de "manera excesiva", y de una multiplicación de episodios de nudos de horcas colgados de árboles, símbolo de los años de segregación y linchamientos en el sur.
"El gobierno estadounidense debe intervenir y proteger a sus ciudadanos", declaró el reverendo negro Al Sharpton, líder de la lucha por los derechos civiles, que había convocado a la manifestación.
"Cuando alguien cuelga un nudo de ahorcado, no es una broma para nosotros", dijo a los manifestantes, que desfilaron por las calles de la ciudad en dirección al Departamento de Justicia.
El movimiento se cristalizó en torno a la pequeña ciudad de Jena, en Luisiana (sur), sacudido por tensiones raciales desde el otoño de 2006.
La mayoría de los blancos implicados en la violencia y las intimidaciones no han sido perseguidos por la justicia pero seis estudiantes negros que agredieron e hirieron ligeramente a un adolescente blanco fueron detenidos e inculpados de intento de asesinato.
Los cargos contra los "Six de Jena" fueron luego revisados, pero los adolescentes todavía corren el riesgo de pasar varios años en prisión.
A fines de setiembre, una manifestación en su apoyo reunió 20.000 personas en Jena.
Según las estadísticas del FBI (Policía federal), casi 4.700 crímenes o delitos racistas fueron registrados en 2005 en Estados Unidos, de los cuales el 68% contra negros.

17 noviembre 2007

El documental es un arma



REPORTAJE: El cine como espejo del conflicto

Una nueva generación de realizadoras palestinas pelea por rodar sus historias en un entorno de hostilidad

BEATRIZ PORTINARI - Santa Cruz de Tenerife - 17/11/2007

"Los primeros 45 días de interrogatorios fueron especialmente duros en aquella cárcel israelí. Empleaban un método de tortura distinto cada hora. Después de las palizas, dos hombres y una mujer soldado me metieron en una habitación, me desnudaron y esposaron. Y mientras la mujer me pisaba la cabeza en el suelo y uno de los hombres me sujetaba, el otro intentaba violarme con un palo". A sus casi 50 años, la activista palestina Aysha Odeh cuenta a la cámara las torturas que sufrió durante su etapa como joven militante de la resistencia contra la ocupación israelí.
No existe industria y los jóvenes cineastas carecen de medios económicos
Ella es uno de los rostros de Women in struggle (2004), el escalofriante documental que la cineasta palestina Buthina Canaan presentó esta semana en el Docusur de Tenerife, el Festival Internacional y Mercado de Documentales del Sur. "Tardé casi cuatro años en rodarlo. Entrevisté a 37 mujeres que se quedaron en cuatro preparadas mentalmente para mirar dentro de sí mismas y hablar", explica Canaan. "Para ellas fue una especie de terapia", añade. En su último trabajo, Maria's Grotto, que ha presentado en Docusur en busca de distribución, también habla de un tema tabú: los crímenes de honor.
Si algo caracteriza a la emergente cinematografía palestina es la denuncia, la crítica social de la vida bajo la ocupación. En general, los jóvenes realizadores prefieren hacer documentales antes que ficción, porque es una forma de contribuir a la lucha no-violenta. Y lo hacen en un páramo. No existe industria ni disponen de medios económicos. A veces ni siquiera tienen equipo técnico y es el director quien debe hacerlo todo; buscar los testimonios, escribir el guión y rodar. Tras la crisis del sector en los años setenta y ochenta -por los conflictos y los problemas económicos- se ha dado un aumento de producciones de cine con escasos medios. En The gates are open... sometimes!, de 2006 (premio en la Muestra Internacional de Florencia), la novelista y realizadora Liana Badr recorre distintos pueblos de Cisjordania y su vida cotidiana, alterada por los checkpoints. Niños que se levantan a las cinco de la madrugada para cruzar la valla y llegar a clase; agricultores que no pueden pisar sus tierras... "Fue peligroso grabar. No teníamos permiso y los soldados nos apuntaban con sus armas", explica Badr, asesora del Departamento de Cine del Ministerio de Cultura palestino.
En Palestina, a la dificultad de hacer cine sin medios y bajo la presión del Ejército, se añade el lastre del machismo. No se ve con buenos ojos el trabajo de las cineastas. No sólo porque no están en sus casas, sino también porque se atreven a hacer preguntas polémicas. Suheir Ismail Farraj, cineasta y fundadora de la organización TAM-Mujeres, medios y desarrollo, ha sufrido el acoso de los soldados imberbes en los checkpoints. Trataban de tocarla a cambio de permitirle rodar. "Incluso entre mis compañeros del equipo técnico, todo hombres, al principio no estaba bien visto. Sólo por eso, pensaban que era una chica fácil".
Después de presentar trabajos sobre hombres-bomba o familias de prisioneros, su último documental, Land in black and white (2003) establece una inquietante comparación entre Palestina y Suráfrica: el apartheid y la reclamación de tierras recuerda demasiado a la política de Israel.
"Antes pensaba que lo importante es la tierra... pero tras estar en África he cambiado de idea. Lo más importante es el ser humano, y en Palestina, aunque las cosas están mal, nadie se muere de hambre ni duerme en la calle. Siempre habrá un familiar o vecino que te ayude. ¡Y nosotros estamos perdiendo la vida por las tierras! Habría que replanteárselo", advierte Farraj.
Aunque la proliferación de cadenas árabes como Al Jazeera y Al Arabiya está permitiendo difundir el trabajo de esta generación de documentalistas, siguen siendo casi desconocidos en su país. Tienen además otro problema; el "robo de historias" por parte de los cineastas israelíes, con mayor libertad de movimiento, subvenciones, acceso a financiación internacional y permisos para grabar en sitios donde sólo por estar, un palestino podría ir a la cárcel.
"Claro ejemplo de competencia desleal", lamenta Canaan. "Aunque sea 100% una historia palestina, con personajes y problemas palestinos, pero con director o productor israelí, ya tienen todas las puertas abiertas y después ganan premios con nuestros problemas. No sólo nos roban las tierras. También nuestras historias".

La fragilidad del héroe


REPORTAJE: El cine como espejo del conflicto

La película israelí 'Beaufort' utiliza el asedio a una fortaleza libanesa como metáfora antimilitarista

JUAN MIGUEL MUÑOZ - Jerusalén - 17/11/2007

Ron Leshem (Tel Aviv, 31 años), nacido en una familia de marchamo izquierdista, sólo ha observado el castillo libanés de Beaufort desde la lejanía de la frontera. Su ansia por conocer a libaneses, palestinos o iraníes y por visitar Teherán o Gaza es infinita. La figura emergente de las letras israelíes no puede viajar a esos lugares, pero sí utilizar la literatura como un medio "para vivir otras vidas y sentirse cercano a personas muy diferentes". En su ópera prima, Beaufort, narra las desventuras de un grupo de soldados que, en 2000, recibieron la orden de resistir en esa fortaleza de los cruzados, sin ninguna finalidad y asediados por Hezbolá. 22 años de ocupación del sur de Líbano acabaron ese año en fiasco. La cinematografía israelí es la estrella invitada en la Semana de Cine Experimental de Madrid, inaugurada el jueves con la película basada en el libro de Leshem, en la que ha trabajado como guionista.

Leshem: "No somos una sociedad, sino varias tribus que se odian"
Que Beaufort haya sido premiada con el Oso de Plata al mejor director en el Festival de Berlín, y que la novela haya sido un éxito rotundo -150.000 ejemplares vendidos en Israel, un país de siete millones de habitantes- ha hecho que incluso el estamento militar respete la obra. "Aunque prohibida en los cuarteles porque tres de los actores se negaron a servir en filas, es obligatorio", sonríe Leshem, "leer el libro en la academia de oficiales. Sirve para preguntarse cómo un comandante debe manejar el miedo".
En su despacho de una productora de televisión, Leshem se explaya. "Las películas que versan sobre el Ejército israelí", apunta, "ofrecen la imagen de los triunfadores, de la fortaleza ideológica. O bien, de la crueldad. En Beaufort queremos proyectar compasión y decir que los soldados eran débiles, que los héroes tienen miedo. Recreamos cómo se forja la amistad, cómo se comporta un grupo de niños, aunque tuvieran 18 años, aislado durante meses en territorio enemigo. Cuando eso sucede, crean su propio lenguaje, se acercan a la religión...". "Pero", añade, "es un relato optimista, porque cuatro madres de soldados se movilizaron y lograron la retirada del Ejército israelí de Líbano".
Salpicada la película de humor negro, de brutalidad, y siempre presente el enemigo chií al que nunca se ve, Leshem lanza su mensaje crítico de las Fuerzas Armadas y de un país de complejidad extraordinaria. "¿A quién estamos enviando a morir por nosotros?". "Cuando se fundó el Estado en 1948", se contesta el escritor, "ingresaban en filas ricos y pobres. Desde hace 10 años, esto ha cambiado. Se manda a la primera línea del frente a los débiles, a los jóvenes de los suburbios, a los inmigrantes recién llegados".
Leshem lo tiene claro: admitir la ignorancia es la base para comprender. "No somos una sociedad, somos varias tribus que se odian. Yo no soy religioso y la gente como yo no se relaciona con ellos". Miembro de una familia acomodada, jamás durmió en una base militar y apenas vistió uniforme. "Hice el servicio en una unidad de inteligencia", apostilla antes de asegurar que vive "en una burbuja": Tel Aviv. "Cuando comencé a saber de esas historias en Líbano, me percaté de que no sabía nada. Me sentí avergonzado". ■

La izquierda en desbandada / 2

JOSÉ VIDAL-BENEYTO 17/11/2007

Nos hemos quedado sin izquierda porque nos han malbaratado sus valores, sus temas, su proyecto. La despiadada desconstrucción de la ideología de progreso a manos de la revolución conservadora en los años 70 que comienza oponiéndose a Mayo del 68 y se hincha en la década de los 80 con Reagan, Thatcher, la militancia evangelista y los think-tanks neocons sigue en marcha, imparable, ad majorem gloriam de la reacción y del capital. El sábado pasado comencé a historiar su decurso francés, con los dos grandes referentes que fueron Raymond Aron -antagonista permanente de su condiscípulo Sartre y de la Francia crítica- y François Furet -que arrebató la Revolución Francesa a las fuerzas populares y la atribuyó a las minorías ilustradas- autores que por cierto hicieron compatible su opción reaccionaria con una clara solidaridad con los estudiantes españoles antifranquistas exiliados en Francia de la que me beneficié notablemente. Pierre Rosanvallon, profesor en el Collège de France y director de estudios en la Escuela de Altos Estudios es un historiador de las ideas y de las formas políticas que desde su temprano militantismo radical, con la incorporación sindical a la CFDT, su teorización de la autogestión y sobre todo su acción en el Partido Socialista Unificado (PSU) hasta su participación en la Fundación San Simon con François Furet, tiene uno de los más brillantes y representativos itinerarios de los conversos adictos al poder intelectual en Francia. Hoy fundador y presidente de la República de las Ideas, plataforma intelectual financiada por las grandes empresas -Air France, EDF, AGF, Altadis, Lafarge, etcétera-, editor de la Revista La Vie des Idées y de una colección de libros en la editorial Le Seuil. Gran debelador del arqueorradicalismo, de la nostalgia revolucionaria así como promotor de una nueva crítica social, ejercida de forma complementaria por y desde la sociedad civil, ha aportado a la nueva ideología de la moderación metaideológica, hoy dominante, la impugnación de las seducciones utópicas, la reivindicación de los limites y de la modestia de la democracia, el pragmatismo de lo posible para el que sólo lo posible es útil y sobre todo la imprescindible puesta al día de las estructuras y comportamientos de hoy, la plena apuesta por la modernidad, a la que nada debe escapar.
La cruzada contra lo común encuentra en la tentativa postmoderna su expresión más acabada
Hemos de pasar del momento revolucionario a la sociedad de la inserción, de la ruptura colectiva de lo social a su individualización personalizada. La crisis del Estado-providencia exige una redefinición del progreso social basada en el reformismo del individuo que establezca una absoluta continuidad entre acción individual y transformación colectiva, que haga del ciudadano-sujeto el eje fundamental de la Cuestión Social. Sus libros La república del centro, Calmann-Lévy 1988, con el citado Furet y Jacques Julliard; El liberalismo económico, Seuil 1989, y en particular La nouvelle Question Sociale, Seuil 1995, son la versión más fundada y consistente del social-liberalismo francés y de la modernidad democrática que hace del ciudadano como individuo la expresión visual de la política. ¿Puede situarse esta opción en la izquierda? No según su formulador que se quiere y que se dice situado en el centro, al que seguramente se han acogido los socialistas beneficiarios de la diáspora sarkozista. La cruzada contra lo común, lo colectivo, lo social a la par que la reivindicación del individuo, del sujeto, del yo como actores principales y máximos referentes posibles de la realidad encuentra en la tentativa calificada como posmoderna su expresión más acabada, su versión más combativa. De los nombres que suelen acompañarla los de Vattimo y en parte Derrida y Baudrillard son los más sonados pero su padre fundador es sin duda alguna Lyotard y su libro La Condition post moderne, Edit. De Minuit 1979, su primera biblia. Luego vinieron los divulgadores y epígonos casi unánimemente insignificantes, entre los que Gilles Lipovetsky L'Ere du vide, Gallimard 1983, fue uno de los más activos. Sin las reservas matizadas de Lyotard, el autor celebra la glorificación del individualismo contemporáneo, subtítulo del libro al que acabo de referirme, inscribiéndolo en su versión narcisista que para él no es símbolo de decadencia sino abolición de lo trágico de la existencia, repliegue hacia la esfera privada en la que sin ideales ni objetivos trascendentes los seres humanos pueden ser simplemente felices. "Fin del homo politicus y advenimiento del homo psicológico que sólo cree en su bienestar", escribe. Pongamos el futuro entre paréntesis, devaluemos definitivamente el pasado y busquemos el goce y el disfrute. La atonía social es nuestra mejor garantía de felicidad.

15 noviembre 2007

JUSTICIA YA


AUDIENCIAS DE LA SEMANA

(14 de noviembre – Prensa Justicia Ya Buenos Aires) Esta semana continúan las audiencias de testimonios en el juicio contra el represor de la ESMA Héctor Antonio Febres en el Tribunal Oral Federal (TOF) Nº 5 de la Capital Federal.

El martes 13 dieron su testimonio Ana Maria Soffiatini, Ana Maria Marti, Elvio Héctor Vasallo, Ana María Isabel Testa, todos ellos ex detenidos-desaparecidos que estuvieron secuestrados en el campo de concentración que funcionó en la Escuela de Mecánica de la Armada.

La primera en declarar fue Ana María Soffiantini, docente, quien fuera secuestrada junto a los dos hijos, a metros de su casa en Fragata Sarmiento y Juan B Justo. Fueron abordados por un grupo de personas armadas, entre ellos el represor Astiz. Fue conducida a la ESMA, donde fue sometida a condiciones inhumanas de vida y tormentos: “Convivir con los gritos, la tortura, era lo cotidiano en la esma.”

En su testimonio relató la existencia de los traslados: “Cada tanto, empezaban a nombrar –a los detenidos por- los números, había movimiento de grilletes, se armaba una fila. Esos días eran de grandes silencios...”. Describió como supo del asesinato de Horacio Maggio, -Nariz, secuestrado que logró fugarse de la ESMA, fue nuevamente secuestrado y asesinado- cuyo cuerpo fue llevado a la ESMA. Los detenidos-desaparecidos fueron obligados a ver su cuerpo sin vida. Asimismo relató como fue asesinada Norma Arrostito. “Ese día mataron a una compañera que amábamos mucho, que respetábamos mucho.” Asimismo detalló como los represores relataban lo que hacían con los cuerpos de los desaparecidos: “ellos mismos nos decían que cerca había un lugar llamado el campito, donde quemaban los cuerpos de los compañeros asesinados o heridos. Se hablaba de “hacer el asadito”.”

“Quiere un cuarto intermedio?” Le preguntó en un momento el juez a cargo del TOF 5, “No, ya esperé tantos años...” contestó Soffiatini, y continuó con su relato. Los represores la llevaron en una ocasión a Ramallo, su lugar de origen. Al llegar, su hermano le preguntó ¿cómo te enteraste?. Su padre había fallecido, de tristeza, y ese día lo habían enterrado. “No pude ver su cuerpo. Tampoco el de mi compañero Hugo Onofri. Eso quisiera que los asesinos digan: donde están los cuerpos de nuestros seres queridos.”

Finalizando su testimonio, Ana María manifestó: “Lo más terrible que intentaron hacer en nosotros fue querer que perdiéramos la confianza en los compañeros. No lo lograron, fue la gran batalla que dimos ahí adentro.”
El siguiente testimonio fue el de Ana María Martí.

Conoce a las victimas de la causa?, le preguntó el presidente del TOF 5 cuando comenzaba su testimonio. “A Margari y Garcia los conocí en la ESMA. A Lordkipanidse lo conocí hace unos años, no lo vi en la ESMA porque fue secuestrado después de que me llevaran al anexo de la ESMA. A Josefa Prada de Oliveri no sé si la vi en la ESMA, porque allí vi cientos y cientos y cientos de personas detenidas-desaparecidas encapuchadas y engrilladas a quienes no podría reconocer.”

“Quiero decir que estuve 20 meses secuestrada en la esma y 1 mes en un anexo”, comenzó diciendo la testigo. Fue secuestrada el 18 de marzo de 1979, en la estación de tren El Tropezón, cerca de San Martin. Cuando fue a sacar el boleto, el vendedor trató de advertirla del peligro con la mirada. Fue rodeada por un grupo de entre 12 y 15 personas.
Fue llevada a la ESMA, y la llevaron al sótano, donde le sacaron una fotografía. “Víctor Basterra, cuando sacó los documentos y las fotos, entre eso estaba mi ficha de entrada en la ESMA, que fue publicada en tapa en un ejemplar del Diario del Juicio”, relató Martí.
Allí fue sometida a condiciones inhumanas de vida y tormentos. Identificó detalladamente quienes eran los represores que actuaban en la ESMA. Fue conducida al altillo del Casino de Oficiales, conocido como Capucha. “La cucha, un cajón sin tapa. Allí estaba esposada y engrillada.”

Su relato sobre el paso por este campo de concentración fue muy amplio y detallado, un enorme ejercicio de memoria. Imaginen si tuvieran que recordar día por día lo que fue sus vidas durante dos años, suele decir Ana María para dar una dimensión de lo que significa.

Y lo hizo, habló de la primera persona que conoció detenida en Capucha:
“A mi derecha había una mujer de 50 años que se quejaba de dolor día y noche sin parar, tenia las piernas negras de los moretones. Cuando pasaba repetía: DIOS MÍO ESTO ES UN GENOCIDIO, DIOS MÍO, DIOS MÍO, ESTO ES UN GENOCIDIO. Era Alicia Eguren, la mujer de John William Cooke. Se la llevaron.”

Y lo hizo, habló de los traslados:
“Lo peor de la capucha eran los traslados, en general eran los miércoles, nos decían que eran a centros de recuperación que la marina tenia en el sur. Ese día no volaba una mosca, vaciaban el sótano. Una vez me llevaron a una salita de interrogatorios y se olvidaron de mi, y vi entrar al sótano a un enfermero de botas blancas, llevaba una bandeja de metal con tubos de metal, algodones y jeringas. Arriba no nos podiamos mover. Los guardias iban llamando a los detenidos por numero. La puerta se abría y se cerraba, los sacaban de a uno. Me anunciaron mi traslado 3 veces. “Yo quería estar en una cárcel, con una reja gruesa, gruesa, que me separara de los represores.”
El día siguiente del traslado en el sótano había marcas de zapatillas arrastradas, olor a desinfectante. Tincho, un detenido-desaparecido, contó que lo llevaron al sótano, que lo inyectaron, pentonaval, que lo llevaron en un camión, lo llevaron a aeroparque. A él lo devolvieron a la ESMA. Estaba medio adormecido.”

Y lo hizo, habló de los bebés nacidos en la ESMA:
“Si de alguien puedo decir que lo vi todos los días es a Héctor Febres. Era operativo, hacia compras, torturaba, llevaba a los detenidos a las casas de sus familiares, pero sobre todo fue responsable de la canallada de los bebés.

Era el que se ocupaba de las mujeres embarazadas. Yo iba cada vez que podía a la sala de las embarazadas. Un día estaba en la pieza de las embarazadas, había 3 o 4 compañeras, entre julio y agosto, entró Febres haciéndose el canchero, traía unas hojas de papel, sobres y lapiceras, se sentó y les empezó a decir que prepararan una carta para el familiar que ellas habían elegido para que cuidara el bebé. Les aconsejaba que pusieran los datos del bebé. Cuando ya se iba, Febres se levantó y dijo –cínicamente-: no se olviden de poner bien clarito el nombre y la dirección de su familiar, a ver si todavía me equivoco y la dejo en una casa con una familia que nada que ver.
Vi a Febres con un moisés, con ajuares de lujo, ahí me di cuenta que no los entregaban a las familias.

Estos juicios, todo lo que se fue sabiendo en los 30 años están basados en nuestros testimonios, pero si yo agarro el testimonio del 79 y veo lo que ha pasado ahora:

En el año 1979, en plena dictadura, a pocos meses de haber salido en libertad, dijimos que habíamos visto una chica muy jovencita, Bebé, Alfonsín de Cabandie, que había tenido un varón. Sabemos que fue apropiado por un policía de apellido Falco, y que hace un pocos años recuperó su identidad.
Dijimos que habíamos visto a Patricia Roisinblit, su bebé fue apropiado por un represor de la aeronáutica, y hoy es un nieto recuperado.
Sabemos de Cecilia Viñas, su bebé fue apropiado por el represor de la ESMA Jorge Vildoza, y hoy está recuperado.
De Maria Hilda Pérez de Donda, dijimos que tuvo una nenita, fue apropiada por un represor de la prefectura, Azic. Fue recuperada hace muy pocos años.

Ellos, los hijos recuperados son no sólo testimonio, sino prueba muy contundente de lo que ha pasado.

Lamento que Febres no esté en esto momento.
Que deje de torturar a las familias, que no saben donde están sus hijas, sus hijos, sus hermanos, y que saben que hay bebés, sangre de su sangre, no los pueden encontrar, y yo no tengo dudas que Febres, Acosta, los represores saben donde están.



Febres es un torturador hoy, las familias siguen torturadas hoy.

Ana María fue sometida a trabajo esclavo, en la Pecera, donde era obligada a realizar traducciones del francés. “Me llevaban con grilletes, la mejor muestra de la esclavitud.”

Dijo de sus compañeros:
“Había un grupo importante de compañeros en la Pecera, siempre digo que si estoy viva es gracias a mi compañeros de la capucha y de la pecera, porque aun ahí donde nos decían claramente que no podíamos ser solidarios porque era ser subversivos, aun en los peores momentos que tuve que pasar, siempre me contuvieron, fueron terriblemente solidarios conmigo.”

Lo peor que le sucedió en la ESMA:
“El 4 de octubre el tigre Acosta me informa que mis hijos habían sido secuestrados por el ejército.” Le dijeron que sus hijos no iban a ser devueltos a su familia porque estaban muy politizados: tenían 6 y 8 años.
Ana María pasó su último mes de cautiverio con sus hijitos en un anexo de la ESMA, una quinta que no logra ubicar, donde los tuvieron secuestrados a los tres. Finalmente, fueron llevados a Ezeiza y de allí viajaron exiliados a España, a la casa de una abuela. Febres le siguió los pasos hasta allí, e incluso un día le golpeó la puerta y entró a su casa allá, evidencia de la continuidad de la vigilancia y la persecución.

“Fue muy difícil sobrevivir. Me pasé años explicando por qué estaba viva, porque te decían que si estabas en libertad era por algo.” Ana María estuvo refugiada en Suiza desde 1979 hasta 2003, año en que volvió por primera vez a la Argentina.

La audiencia continuó con el testimonio de Elvio Héctor Vasallo, de 75 años, quien fue secuestrado en marzo de 1977, cerca de su casa en haedo. Fue llevado a la ESMA, donde fue sometido a condiciones inhumanas de vida y a tormentos. Allí fue sometido a trabajo esclavo durante su cautiverio. “Nací en el 32, en el 30 ya había habido un golpe militar, crecí escuchando como me tenia que vestir, que tenia que leer. Han pasado 30 años, y me digo será justicia? No será justicia? Tengo 75 años.”

El último testimonio de la tarde fue el de Ana Testa, secuestrada el martes 13 de noviembre –exactamente 28 años después se encontró dando su testimonio en este juicio-, fue conducida a la ESMA donde permaneció detenida-desaparecida hasta el 25 de marzo de 1980. Allí fue sometida a tormentos y a trabajo esclavo. “Creo que no es importante abundar en la tortura física sufrida, tortura era todo, declaré en causa esma del 87 que luego fue inhibida con las leyes –de impunidad-. También declaré en España y deben tener mis testimonios, así que lo deben saber de memoria”, le dijo al tribunal.

La testigo se refirió a su secuestro identificando a los represores que participaron de él: “palito, fafá, gerardo, gordo juan carlos. En 28 años y gracias al trabajo de Victor Basterra de sacar los negativos, pudimos ponerles nombres y apellidos. Por ejemplo palito es Donda, Gerardo es Peyón, que está muerto –son muchos 28 años para empezar un juicio-.”

Realizó una descripción detallada del sótano, donde estuvo encerrada durante casi todo su cautiverio. Nombró a los compañeros con los que compartió cautiverio: “Hay mucha gente que no puede estar testimoniando en este juicio, por ejemplo los Villaflor.”

Finalizó su testimonio pidiendo por la identidad de los hijos de desaparecidos apropiados por los represores: “Mas allá de que se lo juzgue en este juicio por torturas, creo poco en la justicia, -a pesar de ello- iré a denunciar cada vez que sea necesario, porque tenemos que encontrar a los 400 chicos nacidos en cautiverio, al menos deberían decirnos donde están, ellos son los desaparecidos de hoy, los desaparecidos de identidad.”

14 noviembre 2007

El Waterloo del Rey de España

Editorial del diario La República de Uruguay


La voz del Sur estremeció los cimientos del planeta. Los jefes de Estado y Gobierno presentes durante el acto de clausura de la XVII Cumbre Iberoamericana, que tuvo lugar en el Salón Riescos, en Santiago de Chile, fueron observadores excepcionales de lo que millones de televidentes vimos y escuchamos. Como nunca, la palabra de los latinoamericanos se alzó bendecida por los padres fundadores: Bolívar, Sucre, Martí, Miranda, O'Higgins, San Martín, Artigas y otros próceres que vertieron su sangre para mostrar el camino de estos pueblos que han sido explotados y expropiados durante siglos.
Pero, fue precisamente el discurso retórico del jefe del Gobierno español, José Luis Zapatero --ante un supuesto milagro económico de su país conseguido sólo en 25 años--, y que hizo recordar al presidente bolivariano, Hugo Rafael Chávez Frías, que la historia de sometimientos y abusos de más de cinco siglos contra nuestras naciones no es agua pasada, sino historia reciente. Chávez citó ejemplos concretos de cómo hace apenas cinco años España, con el fascista Aznar, y Estados Unidos, con el guerrerista Bush, reconocieron al empresario golpista Pedro Carmona Estanga, Pedro el Breve, aun cuando la vía para derrocar a un presidente constitucionalmente electo fuera el magnicidio.
Tampoco fue casual que el Rey español, presente en la Cumbre, se molestara ante la posición asumida, específicamente, de los representantes de las repúblicas Bolivariana de Venezuela y de Nicaragua por defender el derecho inalienable de quienes buscamos una Latinoamérica unida para enfrentar los retos que impone, al mundo, la presencia de un imperio que pretende dominar y decidir los destinos de las naciones pobres.
Pero el Waterloo ideológico ocurrió cuando el Rey de España le preguntó a Chávez de forma abrupta: ¿Por qué no te callas? El monarca, como Carlos I y su imperio en donde no se ponía el sol, no sabe lo que sucede hoy en nuestra sufrida América.
Hace 500 años desde Madrid imperial salió la orden, que se callen "¿Y por qué no te callas indio Gauicarpuro? ¡Cállate Tecúm Umán!, ¿Por qué no te callas Tupac Amarú? ¿Por que no te callas Tupac Hatari, Tiuna, Chacao?, ¡Cállate! y los callaron", recordó Chávez. "No los callaron porque ellos bajaron la cabeza servilmente ante la orden imperial. Los callaron cuando les cortaron la garganta, sólo así los callaron, los descuartizaron los picaron en pedazos y colocaron sus cabezas en estacas a la entrada de los pueblos por los caminos. Ese fue el imperio español aquí", añadió el presidente venezolano, en alusión al pasado de nuestro continente.
Y precisamente ahora, cuando los pueblos del Sur estrechan lazos de unión, los servicios de Inteligencia de Washington, con el visto bueno de la Comunidad Económica Europea, tratan de apagar los movimientos revolucionarios pacíficos que surgen y proponen la refundación de nuestras repúblicas empobrecidas y desangradas por las corporaciones transnacionales, bajo el conjuro de los países poderosos y el apoyo de gobernantes peleles que representan los intereses de las oligarquías nacionales.
La denuncia a las maniobras de los sectores de la oposición, en Bolivia --que lograron impedir la modificación de la Constitución de ese país-- advierten de la conspiración para asesinar al presidente Evo Morales, legítimamente elegido por su pueblo, y demuestra la razón y urgencia de unirnos, como señaló el vicepresidente cubano Carlos Lage Dávila y cumplir el propósito que reclaman hoy los pueblos latinoamericanos y caribeños.
"Señor Juan Carlos, si yo me callara gritarían las piedras de los pueblos de América Latina, que están dispuestos a ser libres de todo colonialismo después de 500 años", ese fue el resumen de la cumbre presidencial para nuestro continente, que hoy marcha en busca de un destino mejor. *

Buenas noticias desde Gaza

Gideon Levy*

Haaretz, 11 de noviembre 2007

Un grupo de paracaidistas de la reserva regresó atónito: "Hamás luchó como un ejército". Compañeros del sargento primero Ehud Efrati, que cayó en combate em la Franja de Gaza hace dos semanas, relataron al periodista Amos Harel, que “desde todos los parámetros nos enfrentó un ejército y no bandas armadas”. Los soldados se sorprendieron al comprobar que los del Hamás usaban elementos infrarojos para visión nocturna desde la distancia táctica que había entre las dos fuerzas, e incluso las gomas de sus zapatos. Éstas son las buenas noticias de Gaza.
Ante todo, es una buena novedad que los reservistas fueron a cumplir la misión, “porque si la hubieron cumplido los conscriptos” −adujeron− “nadie de la población civil sabría qué ocurre en la franja.”. Así, pues, llegó el momento en que los soldados comiencen a hablar. Pero las noticias que trajeron son estimulantes también en otros aspectos. De acuerdo a sus descripciones, en Gaza se creó un Ejército de Defensa de Palestina. En lugar de muchas bandas armadas, se está formando un ejército disciplinado que se prepara para defender su tierra. Si se limita a organizarse en defensa de las incursiones israelíes, no podremos plantearles ningún argumento moral: el Hamás tiene derecho a defender a Gaza de la misma manera en que Tzáhal defiende a Israel.
La formación del ejército asegura que si Israel tratas de llegar a un acuerdo con el gobierno del Hamás − que es el único camino para detener el envío de kasamim− habrá en Gaza quien dé la orden de detener los disparos. Una dirección armada y organizada en el caos de la Franja, es una buena noticia incluso para Israel, pero el respeto que demostraron los soldados de reserva hacia la forma de lucha del Hamás puede entenderse más profundamente. “Nunca vimos así a los palestinos”, dijeron asombrados los soldados al diario Haaretz. Tendríamos que dejar de llamarlos “terroristas” y denominaros combatientes. Un poco de respeto a los palestinos y, fundamentalmente, terminar con la deshumanización que les hacemos, pueden señalar el inicio de un nuevo capítulo.
Aún más, el hecho de que en Gaza se haya creado un ejército (si esta valoración es cierta), puede impedir otra gran campaña militar terrestre que provocará muchas víctimas y no traerá resultados. Tal vez la buena noticia transmitida por los soldados de reserva es la que impedirá que el ministro de defensa concrete sus amenazas de ocupar Gaza e impulse a Israel a intentar, por primera vez, otro actitud hacia el Hamás −el camino de la negociación. Sólo el reconocimiento de la fuerza del Hamás podría convencer a Israel de ser más precavida antes de otra campañá, y sólo su fortalecimiento militar nos hará entender la estupidez de la políticá de boicot que pretende debilitarlos.
Porque ése fue siempre nuestro camino. Sin la oposición violenta de los palestinos, la vida en el Israel conquistador es “bárbara”, y nadie opina sobre el hecho de que hay que terminar la ocupación. No hay oposición− no hay palestinos; no hay terror −no hay avances. Si no fuera por los Kasamim nadie se hubiera acordado de Gaza después de la desconexión.
Un país que siempre estuvo dispuesto a concesiones políticas sólo luego de derramamientos de sangre −desde los acuerdos intermedios después de la guerra de Iomkipur y hasta el retiro del Líbano y la desconexión− tiene que ver otra vez un enemigo relativamente fuerte frente a ella para despertarse. Si no fuera por el Hizbolla, todavía estaríamos en el Líbano; si no fuera por el Hamás, todavía estaríamos en Gaza.
Llegó el momento del próximo capítulo: ¿creímos que sería suficiente salir de Gaza y encerrar a sus habitantes para que la vida en Israel continue siendo “bárbara”? Viene el Hamás y nos recuerda que no es suficiente. ¿Judea y Samaria están tranquilas por ahora? Hasta que no se renueve, también allí, el movimiento de oposición organizado y fuerte no se nos ocurrirá desocupar ni un pequeño asentamiento. Cada dos semanas hablaremos con Abu Mazen, iremos a Anápolis pero no diascutiremos allí ¡Dios nos libre! el punto principal. Continuaremos con nuestras agradables vidas mientras en Judea y Samaria las multirudes seguirán amontonándose en los puestos fronterizos durante horas, seguirán siendo humillados y poniendo en peligro sus vida cada vez que salen de sus casas.
Estas palabras no tienen como objetivo incitar una nueva ola de terror palestino, sino tratar de estimularnos para cambiar, por una vez, nuestras costumbres y llegar a la conclusión −esta vez sin derramamientos de sangre- que la ocupación no podrá continuar por la eternidad. Tal vez justamente las gomas en las suelas del calzado del Hamás nos afectará y el próximo círculo de violencia será evitado. ■

Traducción del hebreo: Ester Mann y Andrés Aldao

*Gideón Levy es una de las contadas voces periodísticas que no tiene compromisos con el establishment israelí.

13 noviembre 2007

La censura iraní se ceba con la mujer


La censura iraní se ceba con la mujer:
Ya no es suficiente con los pañuelos que tapen el pelo, ahora es obligatorio que las mujeres se oculten hasta los hombros


ELPAIS.com - Madrid - 13/11/2007


Los periódicos iraníes han hecho pública una lista de conductas morales inapropiadas para que la policía del régimen de los ayatolás las prohíba y persiga y evite así su extensión entre la sociedad iraní, informa la BBC. Muchos de los vicios a reprimir se concentran en el aspecto occidental de algunas mujeres que desafían a diario al régimen ultraconservador de Mahmoud Ahmadineyad llevando maquillaje "que viola la moral pública" y sombreros en vez de la cara sin pintar y el tradicional pañuelo islámico.
Las autoridades policiales también tienen previsto suprimir películas “decadentes” , el consumo de drogas y alcohol, la extorsión y cualquier otra actitud “gamberra”.
El año 2007 está siendo uno de los más represivos que se recuerdan desde la fundación de la República Islámica, en 1979. La censura del régimen ataca toda conducta o vestimenta contraria a los dictados de la ley islámica. Además, esta última campaña punitiva cuenta con el respaldo explícito del líder supremo religioso, el ayatolá Ali Khamenei.
Adiós al reformismo
La policía ya ha advertido de que no tendrá contemplaciones y castigará con dureza a las mujeres que osen vestir pantalones cortos, abrigos ceñidos o camisas con trasparencias o escotes que dejen al descubierto la piel. Vestir botas altas en vez pantalones hasta los tobillos también estará terminantemente prohibido, como tampoco se tolerarán los sombreros para reemplazar a los pañuelos. De hecho, la policía no admitirá que la mujer sólo se cubra la cabeza con un pequeño pañuelo, tendrá que hacerlo con uno que la tape todo el rostro y el cuello, que llegue al menos hasta los hombros.
En los últimos seis meses, miles de mujeres han sido advertidas o detenidas por su aspecto. Durante el periodo reformista liderado por el ex presidente Mohamed Jatamí, en cambio, las restricciones a la vestimenta femenina se redujeron drásticamente, y comenzaron a proliferar mujeres que seguían al dictado las modas de Occidente, consiguiendo a la vez expresar su propia individualidad y dejar en papel mojado los estrictos postulados de los ayatolás.
Pero las últimas actuaciones y proclamas del Ejecutivo de Ahmadineyad han terminado con la libertad de esa época ya pasada. Hace una semana, el ayatolá Khamenei en persona pidió que la policía incrementara el control sobre los "vicios sociales" dejando la puerta abierta a este nuevo catálogo de prohibiciones que empequeñecen aún más si cabe el pequeño reducto de libertad que tiene la mujer iraní.

...consecuencias desastrosas tras el mandato de Bush


EL PREMIO NOBEL JOSEPH STIGLITZ AUGURA CONSECUENCIAS DESASTROSAS TRAS EL MANDATO DE BUSH

Según el experto, el actual presidente dejará a EEUU con una estructura de clases parecida a la de países en vías de desarrollo
Washington. (EFE).- El presidente de EEUU, George W. Bush, dejará a su sucesor un país endeudado hasta el cuello, un dólar hundido en la miseria y una nación cuya estructura de clases va camino de parecerse a la de México o Brasil.
Así lo asegura el premio Nobel de Economía de 2001, Joseph Stiglitz, en un artículo del número de diciembre de "Vanity Fair" que aparece en la página web de la prestigiosa revista. "Cuando miremos en retrospectiva a la catástrofe que fue la Administración Bush, pensaremos en muchas cosas", dice Stiglitz, quien menciona "la tragedia de la guerra de Iraq, la vergüenza de Guantánamo y Abu Ghraib y la erosión de las libertades civiles".

El experto, que imparte clases en la Universidad de Columbia (Nueva York), destaca que aunque "el daño infringido a la economía estadounidense no aparece cada día en los titulares", sus repercusiones "se dejarán sentir más allá de la vida de cualquiera que esté leyendo esta página".
Insiste en que el hecho de que la economía no haya entrado en recesión durante los casi siete años de Bush en la Casa Blanca o el que la tasa de desempleo esté en un respetable 4,6 por ciento, pueden hacer pensar que el actual presidente realizó una buena labor.

Pero Stiglitz llama la atención sobre la otra cara de la moneda. Destaca, en ese sentido, un sistema fiscal que favorece "terriblemente" a los ricos, una deuda nacional que "probablemente" habrá aumentado un 70 por ciento cuando el actual presidente deje el poder, una enorme morosidad en el sector inmobiliario y unos precios del petróleo más altos que nunca debido, en gran medida, a la inestabilidad en Oriente Medio.
A ello hay que sumar "un dólar tan débil que comprar un café en Londres o París se ha convertido en una operación de altas finanzas".
Esto no acaba ahí, ya que, según Stiglitz, "tras casi siete años de este presidente, Estados Unidos está peor preparado que nunca para afrontar el futuro".
El Nobel recuerda que el país no ha invertido lo suficiente en educar a ingenieros y científicos, "a la gente con las cualidades necesarias para competir con China e India". "No hemos invertido en el tipo de investigación que nos convirtió en la potencia tecnológica del siglo XX y, aunque el presidente entiende ahora -o al menos eso dice- que debemos de alejarnos del hábito de usar petróleo y carbón, durante su mandato hemos aumentado la dependencia de ambos", destaca el académico.

Stiglitz hace hincapié en que cuando Bush llegó a la Casa Blanca, en enero de 2001, Estados Unidos tenía un superávit de 2,2 billones de dólares, que pudieron haberse invertido en áreas clave. "Pero la Administración Bush tenía sus propias ideas", dice Stiglitz, que recuerda que la primera gran iniciativa económica del presidente fue un masivo recorte fiscal para los ricos en junio del 2001, al que le siguió otro en el 2003. "Los que tenían ingresos por encima del millón de dólares recibieron un recorte fiscal de 18.000 dólares, más de 30 veces superior que el que recibió el estadounidense medio", dice el autor.
El artículo apunta que el crecimiento económico ha favorecido a los que no necesitaban ayuda y destaca que un estadounidense de 30 años tiene unos ingresos, ajustados por inflación, un 12 por ciento inferiores a los que tenía su padre hace 30 años.
Además, unos 5,3 millones más de estadounidenses viven ahora en la pobreza que cuando Bush fue elegido presidente, lo que lleva a Stiglitz a concluir que "la estructura de clase de EEUU (...) sigue la dirección de Brasil y México".

A lo anterior hay que añadir el enorme coste de la guerra en Iraq, que según las cifras oficiales supera ya el medio billón de dólares, pero que según Stiglitz podría superar en cuatro veces esa cantidad si se añaden cifras como los incentivos para reclutar soldados o las pensiones vitalicias a soldados heridos. "Es normal preguntarse, ¿qué habríamos hecho con ese dinero si lo hubiéramos gastado en otras cosas?", dice el autor, quien recuerda que la ayuda estadounidense a Africa ronda los 5.000 millones de dólares anuales, el equivalente a menos de dos semanas de gastos en Iraq. ■