18 noviembre 2007

El primer ministro es responsable por la muerte de 33 soldados”



El periódico londinense Sunday Times, afirma que "el primer ministro, Ehud Olmert, fue hallado responsable por la Comisión Vinograd, de la continuación de la segunda guerra del Líbano de verano de 2006 por 60 horas, cuando ya se sabía que era inminente el acuerdo de cese del fuego."
En ese período de tiempo murieron 33 soldados israelíes.
Fuentes allegadas a la Comisión Vinograd que investiga los sucesos de la guerra entre Israel y los soldados de Hesbollah, habrían afirmado que el informe final, aún aguardado por la población del país, se centrará en esas horas de los combates.
El documento, según esas fuentes, mostrará que "Olmert sabía que el acuerdo para detener el enfrentamiento estaba cerca y ordenó al Ejército salir a una misión imposible con la finalidad de sellar el fracaso con una declaración de principios."
Un alto oficial del Ejército habría dicho a un corresponsal del mismo medio de prensa, que el operativo fue planeado durante dos meses y su meta era liquidar a la organización terrorista libanesa. Pero el ataque estaba planeado para ser el inicio de la guerra y no para finalizarla, porque se requerían 96 horas para llevarlo a cabo y las tropas no contaron con ese tiempo."
Días atrás la Comisión Vinograd publicó las declaraciones del que fuera asesor del ex primer ministro Ariel Sharón, Dov Veisglass. Afirmó en su testimonio que seguramente Sharón no habría salido a una guerra en las condiciones planteadas el día que fueron secuestrados dos soldados reservistas por Hesbollah en la frontera con Líbano

Miles de negros piden justicia en Estados Unidos



Marcharon contra los crímenes racistas

Miles de negros estadounidenses se manifestaron en Washington para pedirle a las autoridades federales más firmeza frente a los crímenes racistas y menos intransigencia frente a los delincuentes negros.

WASHINGTON, AFP

La manifestación se inscribe en un movimiento de descontento nacido tras varios casos de jóvenes negros muertos por policías o perseguidos por la justicia de "manera excesiva", y de una multiplicación de episodios de nudos de horcas colgados de árboles, símbolo de los años de segregación y linchamientos en el sur.
"El gobierno estadounidense debe intervenir y proteger a sus ciudadanos", declaró el reverendo negro Al Sharpton, líder de la lucha por los derechos civiles, que había convocado a la manifestación.
"Cuando alguien cuelga un nudo de ahorcado, no es una broma para nosotros", dijo a los manifestantes, que desfilaron por las calles de la ciudad en dirección al Departamento de Justicia.
El movimiento se cristalizó en torno a la pequeña ciudad de Jena, en Luisiana (sur), sacudido por tensiones raciales desde el otoño de 2006.
La mayoría de los blancos implicados en la violencia y las intimidaciones no han sido perseguidos por la justicia pero seis estudiantes negros que agredieron e hirieron ligeramente a un adolescente blanco fueron detenidos e inculpados de intento de asesinato.
Los cargos contra los "Six de Jena" fueron luego revisados, pero los adolescentes todavía corren el riesgo de pasar varios años en prisión.
A fines de setiembre, una manifestación en su apoyo reunió 20.000 personas en Jena.
Según las estadísticas del FBI (Policía federal), casi 4.700 crímenes o delitos racistas fueron registrados en 2005 en Estados Unidos, de los cuales el 68% contra negros.