31 julio 2008

AGONIZA LA DOCTRINA DE LOS DOS DEMONIOS

Por ELEUTERIO FERNANDEZ HUIDOBRO |*|

Desde un tiempo a esta parte ha proliferado en Uruguay una pandemia peligrosísima: la narcótica debilidad generalizada en ámbitos políticos por "lo que diga la prensa".
Trastocando los términos de la realidad (síndrome "televisión"), existe sólo aquello que sale en ella. Los hechos concretos, si no salen, no existen. Es una maravilla de la ontología contemporánea.
Instalado tal fatal equívoco, los hombres públicos se van transformando, incluso mal que les pese, en especialistas sofisticados de crear realidades virtuales en sustitución de las otras. Por lo que así podemos observar cómo y cuánto se vive en un mundo de ilusiones, espejismos y colosales mentiras.
Es más: dado que el mundo "real" actual es ese, hay muchísimos que han renunciado definitivamente a protagonizar cualquier cosa en el otro, incluso a vivir en ese otro y, por ejemplo, producir noticias con sus manos, sus decisiones, sus logros.
Es el mundo de la butaca. Todo transcurre, sea ficción o no, detrás de la pantalla. Nos queda ser espectadores muy cómodamente pasivos, o artistas.
Esto, aunque usted no lo crea, proviene de la abogacía: lo que no está en el Expediente, no existe. O sea: proviene de un "país" que creyendo fervientemente en ello construye realidades de papel y tinta a cambio de físicas y químicas; moleculares y atómicas.
Y, cuando en un país, el Poder Judicial y el Poder Ejecutivo tienen que sudar la gota gorda para demostrar lo obvio, parece evidente que están pasando cosas muy extrañas (por lo menos eso), costosas e incomprensibles.
Cuando por fin ello se logra, recién entonces, no hay más remedio que dar cuenta de la imponente realidad en la prensa. Pero poquito.
En Uruguay (y en el resto de la región) se había construido respecto al pasado una portentosa "realidad virtual": la culpa de todo la tenían por un lado un puñado de guerrilleros locos y por el otro un puñado de militares más locos todavía. Ello quedó transformado en Doctrina: la Doctrina De Los Dos Demonios. Mediante esa mentira quedaban exentos de culpas y responsabilidad todos los demás pero en especial los principales.
Se despachaba rápida y cómodamente el espinoso asunto. Era esencialmente confortable.
Si bien ya venía muy "cascoteada" (aunque costó años hacerlo), en estas horas, con la detención de Bardesio, asistimos a su agonía. El comienzo de su tan previsible final.
Ya en julio de 2003, en pleno gobierno de Jorge Batlle, fue conocido en Uruguay el documento Confidencial recién desclasificado por el Departamento de Estado de los Estados Unidos titulado "Airgram A-17", fechado el 2 de febrero de 1972, en el que se registra una charla del embajador de EEUU en Uruguay, Charles Adair, con Jorge Batlle, quien durante su transcurso le informó al embajador que "como lo había hecho en anteriores conversaciones con nosotros, Batlle repitió que apoya atacar el problema terrorista con un nuevo, pequeño, secreto grupo que pelearía a los tupamaros en sus propios términos. Dijo que tal grupo tendría que ser establecido fuera de las autoridades legalmente constituidas." (El subrayado es nuestro).

Esto lo publicó Búsqueda en su edición del jueves 17 de julio de 2003 (pág. 12).

Luego fue publicado en el libro de Clara Aldrighi "El caso Mitrione (La Intervención de los Estados Unidos en Uruguay)". (pág. 254).
Y, finalmente, el jueves pasado en Brecha.
Pero solamente cuando nosotros lo dijimos por radio y televisión, Jorge Batlle reaccionó violentamente acusándonos de demencia senil y de canalla. Lo primero es posible (y agradecemos el diagnóstico proveniente de tal especialista insuperable), y lo segundo una simple muestra impotente del nerviosismo que lo aqueja y de un proverbial y famosísimo libertinaje de la lengua larga que muy a menudo termina en desamparados e inconsolables llantos de dimensión internacional.
Porque claro: si es citado Bardesio, deberá serlo Jorge Batlle (y también Charles Adair). Las consecuencias políticas y sociales son claras.
El tétrico "Escuadrón de la Muerte" no fue cosa de sórdidos y corpulentos sicarios bigotudos con lentes negros capaces de matar por placer como en las películas (y en la realidad) sino, y muy fundamentalmente, cosa de gente pretendidamente fina, culta, políticamente correcta, y muy disfrazada hasta hoy.
Ahora bien: la culpa de que Jorge Batlle haya sido "buchoneado" tan alevosa y gravemente por Estados Unidos no la tenemos (de paso queda meridianamente claro que aquel lejano y poderoso país lo sabía. En realidad los organizó sistemáticamente, con la invalorable ayuda cipaya, a lo largo y ancho de América y el mundo).
¿Por qué Jorge Batlle no se "la agarró ni agarra" con el Departamento de Estado? ¿Por qué no lo insulta? Todo Uruguay sabe desde hace muchísimo tiempo por qué.
Debemos reconocer sin embargo que en su discurso del 1º de marzo de 2000 en la Asamblea General tuvo la valentía de reconocer la falsedad de la Doctrina de los Dos Demonios y aceptar que en aquel pasado hubo muchas y muy diseminadas responsabilidades y culpas. También reconocer que rompió las barreras políticas puestas acérrimamente por sus correligionarios en la entrada del camino que conducía a la posibilidad de investigar algunas cosas extremadamente graves del pasado.
El penoso, deshilachado, y a esta altura inútil velo que se le quiso poner a la tenebrosa historia del Escuadrón de la Muerte, ya no oculta nada. Todo va quedando a la vista y, muy especialmente, la responsabilidad ineludible del gobierno colorado de aquellos años.
Es más (y como dato curioso): los militares, una vez dueños de la situación (mucho antes de la disolución del Parlamento), desmantelaron el Escuadrón de la Muerte. No admitieron "tercerizaciones": la muerte pasó a ser asunto total y exclusivamente suyo.

|*| Senador nacional, escritor

ACADÉMICOS ISRAELÍES PROTESTAN POR EL VETO IMPUESTO POR EL EJÉRCITO ISRAELÍ A LOS ESTUDIANTES PALESTINOS

ACADÉMICOS ISRAELÍES PROTESTAN POR EL VETO IMPUESTO POR EL EJÉRCITO ISRAELÍ A LOS ESTUDIANTES PALESTINOS

Donald MacIntyre − The Independent
Traducido para Rebelión por LB


Las universidades israelíes se están preparando para un serio enfrentamiento con los militares del país tras denunciar que los extremadamente restrictivos criterios impuestos para la admisión de estudiantes palestinos socavan su libertad académica.
Los decanos de las seis universidades más prestigiosas del país han enviado una carta al ministro de Defensa Ehud Barak protestando contra el límite establecido para aceptar en Israel a un tope anual de 70 estudiantes palestinos y contra la norma vigente que les exige justificar ante los militares la excelencia académica de los candidatos palestinos como requisito para su admisión.
Un prominente profesor de la Universidad Hebrea ha advertido de que el reglamento —que incluye la prohibición a los estudiantes palestinos de cursar estudios "que podrían utilizarse contra el Estado de Israel"— prestará oxígeno a la campaña iniciada en Gran Bretaña y en otros lugares a favor del boicot contra las instituciones académicas israelíes. "Desde su creación, el Estado de Israel ha mantenido cuidadosamente una tradición de libertad académica... Esperamos que el ejército mantenga esta tradición y limite su actuación a cuestiones propias del ámbito de su autoridad, es decir, exclusivamente a evaluaciones de seguridad", decía la carta, firmada por los rectores y decanos de las universidades de Tel Aviv, Hebrea, Ben-Gurion y Haifa, junto con el Instituto Weizmann y el Technion. Al mismo tiempo, cinco destacados profesores han solicitado unirse a una petición del Tribunal Supremo contra las restricciones. En una declaración jurada denunciando la idea de una cuota fija discriminatoria para los estudiantes palestinos, uno de ellos, el profesor Tzvi Mazeh, de la Universidad de Tel Aviv, declaró: "El pueblo judío sufrió durante muchos años restricciones a la libertad académica impuestas a los judíos europeos bajo la forma del infame ‘numerus clausus’".
El origen de la petición se halla en un caso del Tribunal Supremo presentado hace casi dos años por la organización israelí pro derechos humanos Gisha en nombre de Sawsan Salameh, una estudiante cisjordana que había obtenido plaza para realizar un doctorado en química en la Universidad Hebrea de Jerusalén, pero a la que los militares impidieron entrar en la ciudad en aplicación de la prohibición indiscriminada imperante en la época que impedía acceso a los estudiantes palestinos a las universidades israelíes.
Como resultado del caso —reportado en su momento por The Independent— a la señora Salameh se le permitió continuar con su doctorado y la Corte Suprema pidió el Ministerio de Defensa que derogara la prohibición. El Ministerio de Defensa sustituyó las restricciones, y el tribunal pidió entonces que se modificaran. En lugar de ello, dijo ayer Gisha, el Ministerio "en realidad las hizo aún más severas".
Desde entonces se ha negado la entrada al menos a otros dos estudiantes de Cisjordania. Gisha dijo que no sabía de ninguno al que le hubiera sido autorizada.
Además de recitar los habituales argumentos de seguridad para justificar el rechazo, los militares israelíes dicen que a los estudiantes palestinos sólo se les permite acceder a plazas en cursos de PhD y MA si "no hay ninguna alternativa práctica para el área de estudio solicitada que no sea Israel" y si realizan su solicitud de admisión al menos con cinco meses de antelación. Los solicitantes de permisos de entrada tendrán que proporcionar a los militares un informe elaborado por la universidad en el cual ésta explique los motivos de su admisión.
El profesor Ehud De Shalit, jefe del Instituto de Matemáticas de la Universidad Hebrea, escribe en su declaración jurada que: "El Estado puede, naturalmente, impedir la entrada a una persona, palestina o de otra nacionalidad, que suponga una amenaza. Pero eso no da el Estado derecho a interferir en los criterios que la universidad aplica para aceptar a sus estudiantes. Tan pronto como la candidatura de un estudiante ha sido aceptada, éste debe ser tratado, en términos de consideraciones académicas, igual que cualquier otro estudiante, ya venga de China, Francia o de Cisjordania ".
El profesor Moshe Ron, del Departamento de Literatura de la universidad, afirmó que en caso de no modificarse los criterios [para la exclusión de estudiantes palestinos en las universidades israelíes], "se estarán prestando argumentos a aquellos que buscan imponer un boicot académico contra Israel".

Fuente: http://www.independent.co.uk/news/world/middle-east/academics-protest-at-army-bar-on-palestinians-880323.html