FUE COMO REFRESCARNOS LOS PIES EN LA FUENTE DE LA PLAZA DE MAYO POR 2da. VEZ ...
TODOS LOS APÓSTATAS, LOS MITRISTAS Y LOS MANETTOS HAN PERDIDO LA CABEZA.
ALFONSÍN, EL PADRINO Y BINNER A PONER LAS PATAS EN LAVANDINA.
LA CARRIÓ AL CRIADERO DE CERDOS.
LA REVOLUCIÓN NACIONAL: JUSTA, LIBRE Y SOBERANA |
3 comentarios:
El pueblo argentino se expresó.
Las elecciones primarias han sido una experiencia muy buena, salvo que entraron muchos para la decisiva de Octubre. Igualmente los números y el pueblo cantamos.
En Pehuajó obtuvo el candidato de Cristina el 53 % de adhesión, una ciudad ruralista que vive del campo y vió este año las super cosechas en contraste con los lamentos y expresiones que se manifestaron el año pasado.
Cuando el pueblo ejerce su soberanía tiene una fuerza imbatible.
Y en un lugar de mi corazón siento la alegría de verme representada en una mujer que perdió a su gran amor y compañero, pero sigue adelante con sus ideales.
¡Viva!
MARITA RAGOZZA
Una jornada histórica después de tanta insidia que nos compromete a seguir con renovada fé de que un país mejor es posible, saludos Carlos Arturo Trinelli
K
Desde chico me acostumbré a decir “Kordon con K de kilo” cuando me preguntaban mi apellido. Es curioso pero poca gente conoce la letra K. La primera intención siempre es escribir Cordon pero, cuando les digo que va con K, se me quedan mirando por lo que tengo que aclarar “de kilo”. Son muy pocas las que se escriben con K en el idioma castellano. Además de kilo, en sus variantes como kilogramo o kilómetro, yo mismo no conozco muchas más. Tal vez kiosco, algún nombre extranjero aunque bastante utilizado acá como Kevin o algunos apellidos, también de origen foráneo, como Kahn, Koremblit, Kadijevich y algunos pocos más incluyendo el mío propio por supuesto. Hay algunos Kordon con cierto reconocimiento público como Bernardo, un excelente escritor, o Diana, militante por los derechos humanos. Hay algún científico, calificado como el “Messi” de la ciencia, Alberto Kornblihtt que le ha dado lustre y fama a la K.
Pero, no cabe duda que desde hace ocho años el que más ha reivindicado y reformulado el reconocimiento de la letra K ha sido un matrimonio ignoto como la letra inicial de su apellido, como la remota provincia sureña desde la que provienen. Y así fue como fueron surgiendo los jóvenes K, los militantes K, los programas de gobierno K y, sobre todo, los votos K que han reventado las urnas. La letra que el recordado Néstor ha hecho reconocer en todo el país y en todo el mundo. La misma que Cristina viste con toda su elegancia y su polenta para sobreponerse a la tristísima muerte de su marido. Con toda su claridad y su capacidad para llevar adelante esta compleja tarea de conducir nuestro país, pensando en los que menos tienen, defendiendo los intereses argentinos y sudamericanos en todos los foros internacionales.
Hoy, me siento orgulloso de mi letra y puedo decir con todas mis fuerzas que, ahora más que nunca, soy K desde que nací y lo seré hasta la muerte. Apoyo este modelo y vamos por más, por la profundización de este proyecto que ha transformado el país como pocas veces en la historia.
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