30 enero 2008

EL ESPEJO ROTO...

por Andrés Aldao

En este día (30 de enero de 2008), a las 18hs de israel, se conocerá el resumen final de la investigación de la Comisión Winograd sobre el compartamiento del primer ministro Olmert y la célula maligna que compone el resto del gabinete, funcionarios, etc. Y, además, el fracaso práctico, moral y étíco de los generals de la derrota, y la de sus subalternos.

Cifras finales: 119 soldados pagaron con su vida por la incompetencia criminal de los jefes, y 44 civiles por la indefensión y el abandono de la retagurdia.

Fueron éstos crímenes de guerra, ineptitud e irresponsabilidad. Sólo un grupo de reservistas y otro grupo de padres que han perdido a sus hijos en esa "guerra-aventurera" se han movilizado para exigir que el primer ministro asuma su maldita culpa y desaloje el escenario...

Error sobre error: no es el alejamiento de los cargos ni la renuncia de los militares lo que debe prevalecer. Esta es la solución más fácil, la más cómoda, la que va "a cambiar todo para que todo quede como está".

Ningún partido asume su responsabilidad, Y el señor Netaniahu, ese oportunista furgón de cola de la política israelí, que apoyó la aventura, los bombardeos criminales, que calló antes las muertes y el duelo, asoma su rostro idiota e hipócrita para tratar de sumar puntos y retomar el ejercicio de poder y demoler lo que queda de positivo en este país, hambrear a más ciudadanos, liquidar el país.

Hay un dicho que explica muy bien lo que ocurre: la culpa no la tiene el chancho sino quien le da de comer.... Obvio, es el pueblo israelí el que no quiere conflictos ni problemas: disfrutar de lo que tienen (los que tienen), acrecentar lo que tienen (los que pueden...) y todo el resto que se vaya al diablo.
Rescatan del arcón de cosas perdidas "el sionismo 1948", "los antisemitas nos odian", recordemos el holocausto (que buenos beneficios les da a sus difusores cada año), matemos palestinos en gaza (cuántos más mejor...) porque son "terroristas" (como fueron Yair Shtern, Menajen Beguin, Itzaac Shamir, Etzel etc). Y el pueblo israelí calla, mira hacia otro lado, se siente incómodo y prefiere planificar sus viajes al exterior para la próxima pascua... Y los que denuncian, como siempre, son los conocidos, la pequeña minoría cuyas voces no se escuchan ni se notan.

Las tinieblas, que no pueden ocultar el pequeño holocausto que vive el pueblo palestino a manos de los militares (que mandan a sus hijos a Polonia, a visitar los guetos y los campos de concentración y exterminio), se van difuminando... Es sólo cuestión de tiempo el que todos estos criminales de guerra, crueles, sádicos y asesinos deban ser sometidos a juicio y enviados a cumplir sus penas de expiación por los delitos de lesa humanidad que han cometido. En Palestina no hay "desaparecidos": la impunidad de la que gozan los asesinos es tal, que matan a la luz del día y luego vuelven a sus cuarteles o a sus casa y duermen en paz... Como angelitos de la muerte... Únicamente parte de los soldados, al tiempo, comienzan con sus pesadillas, el despertar de la conciencia culpable, la depresión y el suicidio, cuyo número se oculta puntualmente.

Esperaremos, no el informe Winograd, sino la reacción... ¿Habrá...?

1 comentario:

silvia dijo...

HABRÁ REACCION? SI PENSAMOS EN QUE NO MIRAR, NO ENTERARSE, " NO METERSE" ES MÁS FÁCIL QUE EL COMPROMISO ..SE LO VE DICIL.


SILVIA